Los Peligros De Altos Niveles De Cortisol: Cómo Impacta Tu Salud
Introducción
Es posible que hayamos oído hablar del cortisol en relación con el exceso de peso alrededor del abdomen, pero el cortisol hace mucho más que afectar nuestro peso. El cortisol, también conocido como nuestra principal “hormona del estrés,” es el encargado de despertarnos de nuestro sueño y proporcionar a nuestra mente y cuerpo ese impulso de energía para comenzar nuestro día. En este artículo, exploraremos la importancia del cortisol en nuestro cuerpo y cómo controlarlo adecuadamente.
¿Qué es el Cortisol y por qué es importante?
El cortisol es una hormona vital que nos permite lidiar con el estrés cuando es necesario. En situaciones estresantes, partes de nuestro cerebro se comunican con nuestras glándulas suprarrenales (ubicadas justo encima de nuestros riñones) para liberar cortisol. Las glándulas suprarrenales liberan cortisol y, una vez que se alcanza el nivel necesario, el cortisol comunica al cerebro que no se produzca más. Este sistema es eficiente para controlar varias hormonas en nuestro cuerpo.
Cómo Funciona el Cortisol
En una situación ideal, los niveles de cortisol son elevados cuando nos despertamos por la mañana, dándonos la energía necesaria para comenzar el día. Luego, deberían disminuir de manera natural, con picos de cortisol necesarios cuando nos enfrentamos al estrés, pero este aumento debería declinar una vez que el estrés haya pasado. Al acercarse la hora de dormir, los niveles de cortisol deberían ser bajos para permitir que nuestras hormonas naturales del sueño, como el GABA y la melatonina, activen y cumplan su función para hacernos sentir soñolientos.
Peligros de un Alto Nivel de Cortisol
Sin embargo, un exceso de estrés puede llevar a que nuestro cuerpo produzca constantemente cortisol sin darle la oportunidad de reducir naturalmente nuestros niveles. Los peligros de un alto nivel de cortisol no controlado son numerosos y pueden afectar seriamente nuestra salud. Aquí hay algunas consecuencias de un alto nivel de cortisol:
1. Trastornos del Sueño / Insomnio
El estrés crónico crea un estado de hipercortisolismo en nuestro cuerpo. Cuando esta alteración ocurre durante la noche, cuando los niveles de cortisol deberían ser los más bajos, nuestro cuerpo cree que debe estar alerta y despierto debido a los altos niveles de cortisol. Podemos quedarnos dormidos, pero luego despertarnos poco después debido a los picos anormales de cortisol que engañan a nuestro cuerpo haciéndole creer que es hora de despertar y comenzar el día.
2. Hipertensión Arterial, Enfermedades Cardíacas
El cortisol contrae los vasos sanguíneos y aumenta la presión arterial para proporcionar oxígeno a la sangre. Aunque esto es útil cuando enfrentamos peligros inminentes, con el tiempo, las arterias constrictas y la presión arterial alta pueden provocar daño en los vasos sanguíneos y la acumulación de placa. Ambos factores aumentan el riesgo de un ataque cardíaco o daño cardíaco.
3. Dificultad para Concentrarse / Niebla Mental
Con niveles crónicamente altos de cortisol, nuestro cuerpo está constantemente activado, lo que dificulta calmarse y pensar con claridad. Los neurocientíficos han descubierto cómo el estrés crónico y el cortisol pueden dañar el cerebro, ya que el estrés puede matar células cerebrales e incluso reducir el tamaño del cerebro. Altos niveles de cortisol pueden desgastar la capacidad del cerebro para funcionar correctamente.
4. Diabetes
El cortisol proporciona al cuerpo glucosa al aprovechar las reservas de proteínas en el hígado. Con niveles crónicos de cortisol, el cuerpo produce constantemente glucosa, lo que lleva a un aumento de los niveles de azúcar en sangre.
5. Depresión, Ansiedad, Estado de Ánimo Negativo
Los niveles crónicamente elevados de cortisol pueden llevar a la ansiedad o aumentarla, provocar baja energía, cambios de humor y un estado de ánimo deprimido. La investigación muestra que las personas diagnosticadas con depresión tienden a tener niveles más bajos de serotonina en el cerebro y niveles más altos de cortisol en su torrente sanguíneo.
6. Aumento de Peso / Mayor Apetito
Los niveles continuamente altos de cortisol pueden provocar un aumento de peso. El cortisol puede influir en el movimiento de los triglicéridos desde el almacenamiento hacia las células de grasa visceral (aquellas bajo el músculo). El cortisol elevado resulta en niveles altos de glucosa y la supresión de la insulina conduce a células que carecen de glucosa, lo que provoca señales de hambre hacia el cerebro.
7. Problemas de Inmunidad (Infecciones)
El trabajo principal del cortisol es reducir la inflamación en el cuerpo. Sin embargo, con el tiempo, estos esfuerzos por reducir la inflamación también suprimen el sistema inmunológico. Cuando tomamos decisiones alimentarias deficientes y constantemente nos sentimos estresados, nuestros niveles de cortisol permanecen altos, lo que crea caos en nuestro sistema inmunológico y aumenta nuestros riesgos de enfermedades como resfriados, cáncer,
Cómo Bajar el Cortisol: Consejos para Reducir el Estrés
Recuerda que la reducción del cortisol es un proceso gradual, y lo que funciona para una persona puede no ser igual de efectivo para otra. Es importante encontrar las estrategias que mejor se adapten a tu estilo de vida y necesidades individuales. Consultar a un profesional de la salud también es recomendable si experimentas síntomas de estrés crónico o desequilibrios hormonales graves. Aquí te presentamos algunos consejos para ayudarte a bajar los niveles de cortisol y mantener un equilibrio saludable:
1. Practicar la Relajación
La relajación regular a través de técnicas como la meditación, el yoga o la respiración profunda puede reducir el estrés y, por ende, los niveles de cortisol. Dedica tiempo cada día para desconectar y enfocarte en la calma.
2. Ejercicio Físico
El ejercicio regular es una excelente forma de reducir el cortisol. Elige una actividad que disfrutes, ya sea caminar, nadar, correr o hacer ejercicio en el gimnasio. El ejercicio libera endorfinas que mejoran el estado de ánimo y reducen el estrés.
3. Mantén un Sueño de Calidad
El sueño insuficiente o de mala calidad puede aumentar los niveles de cortisol. Establece una rutina de sueño regular y asegúrate de dormir lo suficiente cada noche.
4. Dieta Equilibrada
Una dieta rica en alimentos nutritivos puede ayudar a controlar el cortisol. Evita el exceso de cafeína y azúcar, y opta por una alimentación balanceada que incluya frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables.
5. Gestión del Tiempo
Organiza tu tiempo de manera eficiente para evitar situaciones de estrés de última hora. La planificación adecuada puede reducir la presión y el aumento de cortisol.
6. Apoyo Social
Hablar sobre tus preocupaciones con amigos, familiares o un profesional de la salud mental puede ayudar a aliviar el estrés y reducir los niveles de cortisol.
7. Hobbies y Pasatiempos
Dedica tiempo a actividades que te gusten y que te relajen, como leer, pintar, tocar un instrumento o cualquier otra afición que disfrutes.
Conclusión
En resumen, el cortisol es una hormona esencial que desempeña un papel vital en nuestro cuerpo al ayudarnos a enfrentar el estrés y mantenernos alerta. Sin embargo, cuando los niveles de cortisol están constantemente elevados debido al estrés crónico, pueden surgir graves problemas de salud. Es importante aprender a controlar el estrés y mantener nuestros niveles de cortisol en equilibrio para vivir una vida sana y activa.